martes, 7 de septiembre de 2010

La Verdadera Voluntad y los deseos



Cuando yo era niño mi película favorita era La Historia sin Fin, perdí la cuenta de cuantas veces la vi cuando ya llevaba más de 18 veces, la fui a ver cada vez que en mi escuela el Patronato dedicaba una función de matine en el famoso cine Cid de Tibás, siempre me encanto la magia y el asunto de que sólo la imaginación y el deseo de un niño lector podía mantener vivo todo el universo de fantasía.


Pues resulta que muchisimos años después aún conservo esa fascinación por esta película, que ya no solo me recuerda ese mágico mundo sino también la hermosa etapa de mi niñez. Y tuve la suerte de toparme con el libro en el cual esta cinta esta basada, se titula La Historia Interminable y es inmensamente mejor el libro que la película (como siempre). Es una novela de aventuras que hubiera deseado haber leído en mi adolescencia, esta escrita por Michael Ende y si alguno quiere revivir esa bella etapa de la infancia o regalar un buen libro a algún niño inteligente y amante de la lectura este libro se los recomiendo ampliamente.

De este libro que aún estoy disfrutando les dejo un pasaje que me gusto mucho y por supuesto me envió un mensaje muy personal al leerlo. La escena se desarrolla en un diálogo que el personaje principal Bastían tiene con Graógraman, soberano del desierto de colores, es un león enorme que habita en un desierto con dunas multicolores y que su piel cambia conforme cambia el color de las arenas. (Ese personaje me impresiono)

"Bastián le enseñó al león la inscripción al reverso de la alhaja -¿Qué significa?- pregunto-. HAZ LO QUE QUIERAS. Eso quiere decir que puedo hacer lo que me dé la gana, ¿no crees?
El rostro de Graógraman pareció de pronto terriblemente serio y sus ojos comenzarón a arder.
-NO- dijo con vos profunda y retumbante-. Quiere decir que debes hacer tu Verdadera Voluntad. Y no hay nada más difícil.
-¿Mi Verdadera Voluntad? -repitió Bastián impresionado-. ¿Qué es eso?
-Es tu secreto más profundo, que no conoces.
-¿Cómo puedo descubrirlo entonces?
-Siguiendo el camino de los deseos, de uno a otro, hasta llegar al último. Ese camino te conducirá a tu Verdadera Voluntad.
-No me parece muy difícil- opinó Bastían.
- Es el más peligroso de todos los caminos opinó el León
-¿Por qué? -preguntó Bastían-. Yo no tengo miedo.
-No se trata de eso- retumbó Graógraman-. Ese camino exige la mayor autenticidad y atención, porque en ningún otro es tan fácil perderse para siempre.
-¿Quieres decir que no siempre son buenos los deseos que se tienen? -trató de averiguar Bastián.
El león azotó con la cola la arena en que estaba echado. Agachó las orejas, frunció el hocico y sus ojos despidieron fuego. Bastián se agacho involuntariamente cuando Graógraman, con una voz que hizo vibrar nuevamente el suelo, dijo:
-¡Qué sabes tú lo que son deseos! ¡Qué sabes tú lo que es o no bueno!
Bastian pensó mucho al día siguiente en todo lo que la Muerte Multicolor le había dicho. Sin embargo, muchas cosas no se pueden averiguar pensando: Hay que vivirlas. Y por eso sólo mucho más tarde, cuando había vivido mucho, recordó las palabras de Graógraman y empezó a comprenderlas."

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La vida es un poco de aquello, algo de lo otro y sobre todo mucho de todo.

*°·.¸¸.° Heidy °·.¸¸.°* dijo...

Yo vi la saga completa, la mini serie. Es demasiado buena. Ya me antojé de conseguirme el libro! Y el texto es demasiado bueno.

Saludos